Infecciones de transmisión sexual

Ginecología

Infecciones de transmisión sexual

Las infecciones de transmisión sexual (ITS), aunque pueden provocar graves e irrversibles secuelas, se caracterizan por ser fácilmente curables si se realiza un correcto diagnóstico y un tratamiento precoz.

La revisión ginecológica incluye una adecuada historia clínica, toma de muestras y estudio en sangre para conocer el agente causal e instaurar el tratamiento antibiótico más indicado.

Tradicionalmente, cinco enfermedades han sido clasificadas como de transmisión sexual: sífilis, gonorrea, chancroide, linfogranuloma venéreo y granuloma inguinal.

Además otras infecciones se transmiten sexualmente, incluyendo herpes genital, hepatitis, molluscum contagiosum, piojo púbico, sarna y VIH, que produce el SIDA.

Otras, como salmonelosis y amebiasis en ocasiones se transmiten durante la actividad sexual, pero en general no se las considera ITS.

Una adecuada exploración del área genital permite orientar el diagnóstico según el tipo de lesión evidenciada:

Sífilis, herpes genital y chancroide producen úlceras sobre la piel o sobre las membranas que cubren la vagina o la boca.
Gonococo y Chlamydia causan uretritis (inflamación y secreción de la uretra) en los hombres, cervicitis (inflamación y secreción del cérvix) e infecciones pélvicas en las mujeres, e infecciones oculares en los recién nacidos.

Listado de ITS

Primeras ITS reconocidas

Chancroide

Gonorrea

Granuloma inguinal

Linfogranuloma venéreo (infección por clamidias)

Sífilis

ITS más recientemente reconocidas

Piojos púbicos (Pediculosis pubis) (Ladillas)

Candidiasis

Herpes genital

Condyloma Acuminata (verrugas genitales)